La vida es una escuela maravillosa. Nos envía constantemente mensajes más o menos sutiles, que nos ofrece la oportunidad de despertar, sin embargo lo común es que no los escuchemos. Estamos tan ocupados que nos los préstamos atención. Aún si escuchas el mensaje (<< el coche hace un ruido extraño. Necesito llevarlo a revisar.>>), puede que lo ignores o lo pospongas.Cuando lo ignoras, el mensaje se hace mayor y se convierte en un problema. Y si sigues ignorándolo el mensaje es aún más fuerte y se convierte en una crisis. No hagas caso a la crisis y puede que se convierta en catástrofe.Escucha inmediatamente los mensajes sutiles y toma las medidas oportunas. Si te resfrías, toma unas dosis extra de vitamina C, vete a dormir más temprano y cuídate un poco más, no esperes a que el resfriado te lleve a tener que quedarte en cama.No vayas luchando cada vez más y con mayor esfuerzo, esperando que las dificultades o molestias se soluciones solas.Es mejor pecar de exceso que hacer lo justo para ir pasándolo.Comienza por escuchar esas mínimas señales de alerta. Planteatelas como una advertencia de que algo mayor está de camino y responde como si fuera algo muy importante. No te digo que entres en pánico ni que te obsesiones con las señales, pero si que las escuches, que les hagas caso de inmediato y tan bien que no tengas que preocuparte de ellas de nuevo.Es muy difícil atraer el éxito si estás sumergido en las dificultades, de modo que trata de solucionarlas en cuanto se manifiesten, antes de que las cosas empeoren.

Autora: Carla Fabiola Comandini. Coach DomoPersonal.