Cuando se busca la pérdida de peso dos son los pilares fundamentales en los que debemos basarnos: La alimentación y la actividad física.
Todos sabemos que como nos alimentamos es importante para el control del peso corporal por tanto en este artículo no nos centraremos en este aspecto, sino en porqué el ejercicio es importante en la pérdida de peso.
Cuando buscamos bajar la grasa corporal es necesario lograr que el organismo consuma una cantidad de energía mayor que la que se ingiere. Esto lo podemos lograr bien ingiriendo menor cantidad de energía o bien consumiendo una cantidad mayor por ejemplo haciendo más actividad física (ir a trabajar caminando, subir por las escaleras, etc.) o yendo a entrenar.
Si empezamos a reducir energía limitando la dieta únicamente con el paso del tiempo el cuerpo se acostumbra y empieza a consumir también menor cantidad de energía.
¿Cómo?
Principalmente haciéndonos sentir más cansados para que nos movamos menos y reduciendo la cantidad de músculo para tratar de consumir menos energía. Con el tiempo necesitaremos seguir reduciendo y reduciendo energía en la dieta para poder bajar de peso, lo que a la larga no se puede mantener ya que la sensación de hambre y de fatiga hará inviable esta solución.
Por tanto, si únicamente nos basamos en la dieta para la pérdida de peso sin realizar actividad física gran parte del peso perdido será músculo y no grasa provocando flacidez y que con el paso del tiempo el peso se recupere ya que no tenemos músculos para consumir la energía haciéndonos engordar de nuevo y recuperando la grasa perdida pero sin recuperar el músculo.
Creo que es evidente que esta no es una solución eficaz.
Veamos la otra cara de la moneda, ¿Y si consumimos la misma cantidad de energía pero empezamos a gastar más?
Como nuestro cuerpo ve que el musculo es necesario (ya que estoy entrenando) no lo reduce y de este modo podremos mantener una mayor cantidad de músculo y nuestro cuerpo podrá quemar más energía y por tanto reducir más la grasa corporal.
En este segundo caso además de bajar de peso, el peso que se perderá será en forma de grasa y lograremos mantener la masa muscular teniendo un cuerpo más tonificado.
Para concluir me gustaría ejemplificar la situación:
Imaginemos que en nuestro trabajo al final del día nos pagan 100 euros (sería la energía que nos da la dieta). Si nuestro objetivo fuera quedarnos con 0 euros al final del día tenemos dos opciones, podemos no ir a trabajar y por tanto no cobrar (sería el equivalente a solamente hacer dieta) o podríamos ir a trabajar, cobrar los 100 euros y de camino a casa comprarnos algún capricho como unas zapatillas de correr nuevas, darnos un buen masaje relajante o comprar esa camisa que llevábamos tiempo deseando (sería el equivalente a gastar energía con ejercicio). Al final del día en ambos casos la cuenta final es la misma 0 euros pero en un caso no tengo nada y en otro tengo unas zapatillas, me han dado un masaje o me he comprado una camisa nueva.
¿Tú que elegirías?
Autor: Roberto Conesa. Entrenador personal en DomoPersonal especializado en nutrición y enfermedades metabólicas.