Las lesiones en articulaciones y músculos son muy frecuentes entre la población adulta aficionada al deporte. El sobrepeso, la falta de musculación por inactividad física, la alimentación o un mal calentamiento previo al ejercicio físico son las causas más comunes.
Por ello, los Servicios Médicos – Sanitas Real Madrid nos ofrecen un informe en el que aseguran que el fortalecimiento de nuestras articulaciones conducirá a una notable reducción en el riesgo de lesiones. Según el Dr. Chamorro, el mejor tratamiento es la prevención. El primer paso para hacer deporte es el calentamiento. Gracias a este periodo de preparación, los músculos consiguen soportar la intensidad del trabajo que más tarde el deportista va a realizar. A través de ligeras contracciones y posteriores elongaciones musculares se consigue que los músculos se contraigan con mayor velocidad, potencia y eficacia. De este modo, se potencia el movimiento y no se perjudica la coordinación.
Algunos de los beneficios que produce la preparación son:
- Reducción de la viscosidad muscular, por lo que mejora la contracción-relajación muscular.
- Mejora de la elasticidad de la musculatura y los tendones.
- Aumenta la temperatura corporal, lo que acelera el metabolismo y permite que el organismo utilice más eficazmente los sustratos fundamentales para la producción de la energía que requiere la actividad física intensa.
Para proceder al calentamiento de nuestras articulaciones, lo aconsejable es realizarlo desde arriba (cuello) y finalizar en los tobillos; con movimientos progresivos en amplitud buscando trabajar el máximo grado de movilidad de cada articulación.
Una vez finalizada esta etapa, procederemos a realizar estiramientos incluyendo al menos un ejercicio por cada grupo muscular o articular de nuestro cuerpo.
Finalmente, y como siempre recordamos en DomoPersonal, tras terminar la actividad física es fundamental realizar ejercicios de enfriamiento y vuelta a la calma de forma paulatina para relajar los músculos.
Causas de las lesiones y lesiones previas
Según el Dr. Mannuel Chamorro, la mayoría de lesiones producidas en el deporte se deben a métodos de entrenamiento incorrectos, anomalías en la estructura de la persona, y a la debilidad de los músculos, tendones y ligamentos. El médico de los Servicios Médicos – Sanitas Real Madrid nos da para ello las siguientes recomendaciones y así evitar el perjuicio para nuestras articulaciones:
– Evitar el sobrepeso: las estructuras articulares están diseñadas para una determinada fisionomía. Si el peso se excede, las articulaciones tienen que realizar un mayor esfuerzo.
– Tener una musculatura adecuada: el control que ejercen los músculos sobre la articulación es importante.
– Prepararse antes de practicar deporte: no todos los ejercicios se adaptan a las condiciones físicas y estructurales de una persona, para practicar algún deporte hay que realizar una preparación mínima que evite lesiones.
– Usar un buen calzado para absorber mejor el impacto y minimizar las lesiones.
– Realizar un entrenamiento con ejercicios combinados reduce la posibilidad de sobre exigir a músculos o articulaciones.
– Hacer deporte en un terreno blando ayuda a disminuir la fuerza del impacto.
– El exceso de ejercicio físico puede producir fatiga muscular y, posteriormente a lesiones articulares, debido al exceso de trabajo.
– Una vez realizada la práctica deportiva, hay que descansar al menos 5 minutos. Caminar lentamente, sacudir los brazos o moverse a un ritmo más lento permitirá que su cuerpo vuelva de forma gradual a un estado de reposo.
– Si presenta articulaciones inflamadas, es necesario acudir a la consulta del médico especialista. Hay que mantener reposo y en ningún caso sobre utilizar la articulación, se corre el riesgo de producir daños irreversibles en los componentes que forman la articulación.
Con todo ello, el informe médico incluye una relación de los deportes menos agresivos para nuestras articulaciones: natación, remo, ciclismo, senderismo, gimnasia, pilates y yoga.
La hidratación ayuda al fortalecimiento de las articulaciones
Beber agua es importante para que nuestro organismo funcione correctamente a lo largo de nuestras vidas. Pero más todavía si practicamos deporte, ya que la hidratación también influye positivamente en el fortalecimiento de las articulaciones. Para el Dr. Chamorro es muy importante hidratarse antes, durante y después del ejercicio, así como reponer sales minerales (con fruta o bebidas isotónicas) con el fin de evitar calambres y otras lesiones.
Además de una dieta equilibrada, donde el ácido graso omega-3 de los pescados ayuda a reducir la inflamación de las articulaciones, los deportistas pueden optar por incluir suplementos vitamínicos como la glucosamina para mejorar el rendimiento y reducir el riesgo de lesión.
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